Todos sabemos que el verano es una época difícil de llevar en el embarazo, ya que la temperatura corporal de la embarazada sube debido al cambio hormonal y al aumento del flujo sanguíneo. Pero hay algunos consejos que pueden hacer que disfrutes de un verano más llevadero y, aunque no lo creas, ¡pasarlo muy bien!
- Protección solar. La protección solar es fundamental en cualquier momento de la vida, pero si estás embarazada aún más; ya que la piel es más sensible a los rayos UV y si no proteges tu piel seguramente te saldrán manchas que son muy difíciles de quitar. Es importantísimo que se usen filtros de protección 50+, aplicar generosamente y renovar cada dos horas o si has estado en el agua.
- Sombra. Intenta buscar espacios con sombra y evita las peores horas del día, las mejores son por la mañana prontito o al atardecer. Es verdaderamente importante evitar bajones de tensión y mareos provocados por el calor.
- Hidratación. Este punto es crucial. Bebe mucha agua y líquidos que no posean mucho azúcar. No esperes a tener sed, una vez que la tienes es porque ya ha empezado la deshidratación, ir dando sorbitos es lo ideal.
- Alimentación. Debemos alimentarnos poca cantidad y con frecuencia, no deben de pasar tres horas sin haber comido nada. Intentar evitar comilonas calientes. Una buena aliada para esta época del año es la fruta y en esta temporada hay muy variada y muy rica. Si te cansas de ella la puedes tomar en batidos o granizados.
- Aguas poco profundas. Cuando estamos embarazadas tenemos muchos calambres musculares, por ello hay que asegurarse de que en la zona donde nos metemos toquemos el fondo sin problema.
- Ropa. El tipo de ropa que uses hará que la sensación térmica de tu cuerpo suba o baje. Usar ropa fresca, holgada y de algodón te ayudará a llevarlo mejor.
- Disfruta. No te olvides de disfrutar, ya que este embarazo nunca volverá, y al año siguiente no te acordarás de ti misma porque una personita ocupará tu atención en un ¡¡doscientos por cien!! Así que disfruta, cuídate y mímate; y sobre todo, valora tu cuerpo, que está haciendo posible que tu bebé crezca sano y fuerte.